En una fecha especial para el país, 10 de Agosto, en la ciudad de Cuenca, se desarrolló el Foro de Autoridades de los GAD´s del Ecuador “Mujeres frente a Hábitat III”, a este evento acudió la prefecta de Loja (e), Nívea Vélez, en calidad de panelista, y en el que se llegó a importantes resoluciones.
Con la concurrencia de concejalas, alcaldesas, prefectas y viceprefectas, se desarrolló el encuentro previo al Encuentro Mundial Hábitat III, que se desarrollará en Quito, con el tema desarrollo urbano, en que se incluyen varias temáticas como género, medio ambiente, vivienda, espacio público y más.
María Cecilia Alvarado, prefecta (e) del Azuay, en la apertura reflexionó sobre la agenda urbana, la necesidad de consensuar propuestas para que Hábitat III integre aspectos de lo urbano y rural.
La representante de ONU Mujeres en Ecuador, Moni Pizani, reconoció la participación de las autoridades mujeres asistentes y su interés por participar en espacios de debate que permiten consolidar las propuestas desde su realidad: como mujeres, como autoridades.
Declaratoria
Se trabajó en la Declaratoria de Cuenca, que se resume en tres puntos: el desarrollo sostenible es posible sólo con un sistema de gobierno descentralizado; Hábitat III y la nueva agenda urbana debería hacer un llamado contundente para apostar por la descentralización y la democracia paritaria, terminando el centralismo que duplica funciones; y, que la prosperidad urbana solo es posible con prosperidad y justicia en lo rural; y que, una nueva agenda urbana sólo será posible si se profundiza la lectura de los problemas y las propuestas de soluciones con una mirada de igualdad y equidad de género.
Margarita Carranco, coordinadora del Comité Ecuatoriano de Mujer y Hábitat, informó que el Encuentro Mundial Hábitat III se desarrollará el 16 y 17 de octubre de este año. Las inscripciones son virtuales, son cerca de 30.000 las personas que vienen de todo el mundo; los eventos son oficiales y coordinados por el gobierno nacional, agregó.
El encuentro reunirá a gobernantes, para discutir de aquí a 20 años, cuáles serán las políticas de desarrollo urbano que se van a mantener, para ello hay un documento cero que se constituirá al final en la declaración que se firmará.
Lo que se pretende en estas reuniones preparatorias es buscar que se tome en cuenta las propuestas de la sociedad civil, ya que la preocupación es que el tema rural no se lo maneja como la fuerza y está casi ausente; de no ser el caso, se armará una agenda propia para hacer un seguimiento a los gobiernos locales y nacional, concluyó Carranza.
Ruralidad
Nívea Vélez, prefecta de Loja (e), en su ponencia sostuvo que es fundamental que las mujeres que están en el quehacer político, puedan tener espacios, para lograr alianzas y acuerdos que permitan impulsar una agenda común.
“Es importante este momento analizar el documento cero de Hábitat III y vamos a luchar para que recoja también la problemática de lo rural ya que tal como está planteado, está direccionado a lo urbano, hay una razón, la mayoría de personas viven en las ciudades, pero es necesario entender por qué han abandonado lo rural, dice Vélez.
Añadió que el abandono de lo rural se da en Ecuador, porque este sector está desatendido, porque han cerrado las escuelas unitarias y ahora sólo se habla de escuelas del milenio, que obligan a la gente rural o a quedarse sin educar o a hacer grandes esfuerzos para traer a los niños a la única escuela que queda abierta.
Asimismo, la prefecta Vélez recordó que el Gobierno Nacional debe a las prefecturas más de 200 millones, en relación a las competencias, “existen más responsabilidades pero se redujo el presupuesto”.
Al concluir el Foro las participantes firmaron la Declaratoria; además, estas demandas seguirán debatiéndose y alimentándose de los grupos focales de mujeres en todo el Ecuador y en el II Encuentro de Mujeres Autoridades de Gobiernos Autónomos Descentralizados del Ecuador previo al Foro Hábitat III.
ACUERDOS DEL PRIMER ENCUENTRO DE MUJERES AUTORIDADES DE GOBIERNOS AUTONÓMOS DESCENTRALIZADOS DEL ECUADOR FRENTE AL FORO HÁBITAT III Y EL DOCUMENTO CERO DE LA NUEVA AGENDA URBANA
En Cuenca, el 10 de Agosto de 2016, fecha en que el Ecuador y América recuerdan el “Primer Grito de Independencia” en memoria del 10 de Agosto de 1809, las mujeres autoridades de los Gobiernos Autónomos Descentralizados del Ecuador que suscriben la presente, reunidas en el Foro de Mujeres Autoridades frente a Habitat III,
Estas demandas de las mujeres inician con este documento pero seguirán debatiéndose y alimentándose de los grupos focales de mujeres en todo el Ecuador y en el segundo Encuentro de Mujeres Autoridades de Gobiernos Autónomos Descentralizados del Ecuador frente al Foro Hábitat III.
CONSIDERANDO,
Que es indispensable colocar las demandas y las propuestas de las mujeres en el Foro Mundial Habitat III que se desarrollará en Quito, entre el 16 y el 21 de octubre de este año
PREOCUPADAS,
Por la ausencia de un liderazgo marcado en la organización de Habitat III por parte de los Gobiernos Intermedios y Locales y del Documento Cero, en un momento en que la discusión por la descentralización y el rol de los gobiernos de cercanía, constituye el centro del debate mundial para la superar la pobreza, garantizar la vigencia plena de los derechos humanos y la participación ciudadana,
Y por la organización de ONU Hábitat, que se desarrolla cada 20 años cuando la importancia que tiene este foro amerita hacerlo con mayor proximidad.
CONVENCIDAS,
Que la tarea de la humanidad por superar la pobreza y alcanzar la inclusión y prosperidad, va de la mano con el respeto a la diversidad, la autonomía territorial, la planificación que apueste por las capacidades locales y reconozca las grandes potencialidades en los territorios para alcanzar un desarrollo sostenible,
Que somos capaces de construir hábitats y territorios de plena vigencia de derechos que eviten la migración forzada de sus habitantes, particularmente de las mujeres rurales,
Que el desarrollo sostenible se sostiene en el fortalecimiento de los principios fundamentales de la democracia,
Ante el contenido del documento “Borrador Cero” propuesto como declaratoria de Quito, de Habitat III, la Nueva Agenda Urbana,
DECLARAMOS,
- El desarrollo sostenible solo es posible con un sistema de Gobierno Descentralizado:
1.1 Habitat III y la nueva Agenda Urbana debería ser un llamado contundente para apostar por la autonomía, la descentralización y la democracia paritaria. El nuevo paradigma debería ser terminar con el centralismo que duplica funciones, limita aún más los presupuestos y desconoce las potencialidades del territorio para lograr su prosperidad; así como fortalecer la democracia en nuestros países, dejando atrás todas las barreras que impiden que las mujeres alcancemos en paridad puestos de decisión, representación y planificación.
1.2 Los 175 párrafos que conforman el Documento Cero sólo serán posibles si el nudo de la discusión se realiza en y con los Gobiernos Locales[1]. La aspiración de alcanzar los objetivos y que se trabaje eficazmente por los “Compromisos transformadores para el Desarrollo” dependen de una apuesta global por reconocerle poder real y en consecuencia recursos económicos a los gobiernos que se encuentran más cerca de la ciudadanía, sus demandas y su contraloría.
1.3 El reto de la descentralización debería ser un compromiso también de los organismos internacionales, de las Naciones Unidas y todo su sistema, incluyendo a ONU Hábitat, así como de los organismos financieros.
1.4 Los Gobiernos Locales y Gobiernos Intermedios somos, por naturaleza, el espacio en donde los conceptos de Agroecología, Participación Ciudadana y Economía Popular y Solidaria cobran vigencia en la generación de mejores condiciones de vida para quienes habitan estos territorios.
- La prosperidad urbana solo es posible con prosperidad y justicia en lo rural:
2.1 Todos los retos de la “Nueva Agenda Urbana”, entendiendo la complejidad y diversidad de las ciudades, pasa indudablemente por una responsable discusión y planificación de la íntima relación de lo urbano con lo rural. La “Nueva Agenda Urbana” debería, a más de la descentralización, mirar con atención lo que sucede fuera de lo “urbano” y que se constituye en causa y efecto de los problemas que padecen las ciudades y las propias las ruralidades. No es posible hablar de prosperidad y economía urbana sin garantizar prosperidad rural. El desarrollo rural, que no es urbanización, merece toda la atención en planificación y presupuesto, una inversión prioritaria en desarrollo rural es la mejor inversión para la reducción de la pobreza, la garantía de alimentos y la sostenibilidad ambiental, todos estos sectores que en gran medida se encuentran en manos de mujeres y comunidades.
2.2 No es posible hablar de desarrollo sostenible sin decir nada al respecto de los procesos extractivos de recursos naturales que afectan a las poblaciones rurales, a las fuentes de agua y a la producción de alimentos seguros.
2.3 Apostarle al desarrollo rural, deuda histórica en el Ecuador y los países de América Latina, significa mirar con atención a los Gobiernos Locales competentes para estos territorios y los sectores de la economía que se relacionan en mayor medida con el campo, en especial a las economías comunitarias, solidarias y de las mujeres, en estas zonas.
2.4 Reconocemos la enorme diversidad entre las realidades urbanas y las realidades rurales, superando la homogenización que a nivel normativo y regulativo se refleja en la existencia de normas comunes de planificación que desconocen y/o ignoran la realidad, las potencialidades y las vocaciones territoriales locales.
- Una nueva agenda urbana solo será posible si se profundiza la lectura de los problemas y las propuestas de soluciones con una mirada de igualdad y equidad de género.
3.1 En todos los temas de la Nueva Agenda Urbana, desde participación hasta resiliencia frente a los desastres naturales, la visión de las mujeres merece mayor profundidad y compromisos verificables. Los sistemas urbanos de seguridad, transporte, planificación territorial para el acceso a vivienda, desarrollo de emprendimientos, comunicación, economía urbana, acceso a agua, mercados, educación, recreación… merecen particularizar la situación de las mujeres en cada territorio para que las acciones se encaminen a mejorar sustancialmente su realidad.
3.2 La Nueva Agenda Urbana, para ser tal, debe promover formas democratizadas de cuidado compartidas entre mujeres y hombres así como mecanismos y estrategias de compatiblización de la vida laboral y familiar, donde son centrales nuevas modalidades de trabajo, sistemas de transporte, cambios de patrones culturales, etc., merecen la planificación y presupuestación de políticas públicas innovadoras.
3.3 Las mujeres, la mitad de la población mundial, seguimos estando en condiciones de permanente vulneración de nuestros derechos humanos. La violencia contra las mujeres, física, psicológica, económica y política, se refleja en las condiciones de pobreza y en la invisibilidad de los aportes que las mujeres hacemos para el desarrollo económico, social, cultural y ambiental así como para la efectiva democracia de de nuestros territorios.
3.4 Nuevamente, la descentralización y el desarrollo rural, son elementos indispensables para lograr que las mujeres, en especial aquellas en condiciones de pobreza y marginación, puedan insertarse a modelos de desarrollo sostenibles, que garanticen vida digna a través de actividades económicas y garantía de derechos para ellas y sus hijos e hijas.
3.5 Las mujeres como portadoras del bagaje cultural de sus pueblos que traspasan los saberes y conocimientos ancestrales a sus hijos y a sus comunidades.
EXHORTAMOS,
A todos los y las participantes del Foro Mundial Hábitat III a incorporar estas demandas, a que más allá del documento de la Declaración de Quito, los Gobiernos Nacionales que suscriban la declaración, se atrevan a profundizar el debate sobre descentralización, desarrollo rural y género que proponemos.
[1] En el caso del Ecuador: provinciales, municipales y parroquiales.