Generar propuestas de dinamización económica en diversas áreas, es uno de los objetivos de la Prefectura de Loja por intermedio de la Dirección de Desarrollo Productivo quienes realizan los estudios que permitan determinar la factibilidad de la instalación de una planta de procesamiento de cueros de bovinos  (curtiembre).

El prefecto Rafael Dávila explica que se trata de fortalecer el tejido empresarial de la provincia, favoreciendo la generación de empleo e ingresos en la economía local, en los que se involucren entidades públicas y sector privado.

En este contexto, técnicos de la entidad recaban la información necesaria de experiencias en plantas procesadoras de otras partes del país y realizan los estudios relacionados con el análisis, viabilidad técnica, economía-financiera y ambiental.

Las siguientes acciones se encaminan a la socialización e información del avance del proyecto con la participación de los sectores vinculados, como asociaciones de ganaderos; administradores de camales municipales y empresas de rastro y comerciantes de cueros de la provincia de Loja.

Como actividades previas se plantea realizar campañas de mejoramiento de manejo de la ganadería, para que la actividad sea económicamente productiva, crear centros de acopio de los subproductos en los centros de Faenamiento y definir alianzas estratégicas que permitan una comercialización formal, organizada y responsable con la sociedad, organismos competentes y el ambiente.

Varios cantones lojanos tienen en la ganadería una de las principales actividades económicas y el aprovechamiento de las pieles de bovinos constituye una atractiva actividad productiva.

Son decenas de agricultores y ganaderos capacitados por la Prefectura de Loja que, día a día, optimizan su forma de producción acorde a los avances tecnológicos que la entidad provincial implementa en los renovados centros integrales de Lanzaca y Yamana.

En Saraguro, varias charlas y talleres prácticos se han desarrollado, durante las últimas semanas, con la participación de pequeños ganaderos de la parroquia Urdaneta, quienes como fase culminante se trasladaron al cantón Gonzanamá, para realizar una gira de observación en el Centro Integral de Desarrollo Productivo “Lanzaca”.

Pablo Almeida, técnico de Desarrollo Productivo de la Prefectura, informa que en la metodología del recorrido establecieron cuatro estaciones, la primera de ganado bovino, en donde se explicó como se realiza el manejo del ganado totalmente estabulado, así mismo se hizo una demostración de cómo realizar la rutina de ordeño.

La segunda estación  se centró en la explicación de la utilización de maquinaria agrícola tanto para realizar ensilaje y heno para mejorar la alimentación de ganado en temporada de escasez; y, el empleo de maquinaria de mecanización agrícola, cuya aplicación busca abaratar costos de producción para los agricultores.

Luego técnicos pecuarios de Lanzaca desarrollaron una charla explicativa de todos los proyectos que se manejan en los centros de desarrollo productivo de Lanzaca (Gonzanamá) y Yamana (Paltas), que maneja la Prefectura.

Max Bravo, administrador del Centro Lanzaca, efectuó la socialización del programa caprino, indicando el manejo de cabras en completo confinamiento (estabuladas), facilitando la alimentación y ordeño de manera inocua.

La respuesta fue positiva de parte de los asistentes que conocieron los programas, con la clara intención de aplicar en su parroquia.

Gracias al trabajo de la Prefectura de Loja se ha logrado incrementar  los sistemas productivos de arroz. El cambio de mecanización y siembra que antes se hacían tradicionalmente directas ahora son con invernaderos por bandejas beneficiando al agricultor.

Augusto Cueva, técnico de la institución, señala que este cambio implementado poco a poco tiene aceptación porque mejora la producción.

Cueva dice que de los resultados obtenidos se tiene un incremento notorio de un 30% por el cambio de metodología, el ahorro de mano de obra y el tiempo del ciclo de vida del arroz va disminuyendo, por ende es más beneficio para el agricultor.

Explica que para pasantías y visitas se implementó en Zapotillo una finca demostrativa en terrenos del agricultor Jorge Castillo y en Macará la finca de Andrés Castillo donde se realizan prácticas.

A las diferentes reuniones de campo asisten los productores a quienes se les explica todos los procesos y procedimientos que facilitan la producción de arroz. “A la gente de Macará se la traslada a Zapotillo para que conozca el nuevo sistema y manejo más avanzado en tecnología”.

Explica que en Zapotillo la producción era de 160-170 quintales por hectárea ahora es de 200-210 quintales. En Macará tienen un  promedio de 145 quintales y se quiere incrementar hasta 170 quintales. Todos estos cambios y beneficios que se consiguen son para beneficio del agricultor.

Señala que la prefectura apoya este cambio, en forma permanente se está capacitando a los agricultores, se hace conocer las nuevas tecnologías para siembra a fin de que la provincia de Loja sea más competitiva en producción, aprovechando que en estos dos cantones las radiaciones solares son muy superiores a las existentes en la provincia del Guayas.

La respuesta de los arroceros en Zapotillo ha sido positiva, cada vez se incrementan agricultores quienes adquieren maquinaria para implementar tecnología considerando muy favorable el costo-beneficio, recuperación de la inversión y mayor utilidad.

La Prefectura de Loja, por intermedio de la Dirección de Desarrollo Productivo, con sus técnicos prestó apoyo a la Isla Santa Cruz en el Archipiélago de Galápagos, para trabajar en el restablecimiento del equilibrio ecológico de cultivos existentes, especialmente café, por cuanto el uso indiscriminado de plaguicidas químicos provoca plagas y enfermedades de difícil control.

Jorge Burneo, asesor agrícola de la Prefectura de Loja, señala que los objetivos fueron identificar e inocular los agentes microbianos endógenos para control natural de las plagas en la Isla Santa Cruz.

Asimismo, evaluar la efectividad de los microrganismos en campo a través de fincas seleccionas; multiplicar los mejores microorganismos evaluados para propiciar el control natural de las plagas; y, capacitar a los agricultores en el uso de control natural como parte integral de manejo de plagas y enfermedades.

Antecedentes

Se indica que desde los años 80 en la isla se comenzó a usar agroquímicos en la producción agrícola y se incrementó en los años 90 con la demanda de alimentos por parte de las empresas turísticas.

El uso de plaguicidas promovió el desequilibrio, ya que se han eliminado muchos depredadores y parasitoides naturales. Con el boom de los invernaderos y la dificultad de control se introdujeron plaguicidas que disminuyeron el control natural y se produjo el desequilibrio.

Hoy los agricultores se han acostumbrado a la acción química y creen que no pueden producir nada sin uso de químicos. Con el incremento de la demanda de alimentos y al no poder producirlos en las islas, se traen alimentos del Continente y con ellos llegan las plagas.

Con todas estas consideraciones, los técnicos de la Prefectura de Loja presentaron un proyecto para revertir la tendencia del uso de químicos hacia el control natural con entomopatógenos de origen natural en Santa Cruz.