El trabajo del Centro de Acción Social Matilde Hidalgo con las personas mayores busca mejorar las condiciones de vida y su bienestar social con el objetivo de que permanezcan en su entorno habitual y familiar, fortaleciendo y manteniendo su autonomía e independencia, que por alguna razón han perdido y en muchos casos no la tienen dentro de su propio hogar.
80 personas mayores de 65 años en situación de pobreza o exclusión social, principalmente personas con algún nivel de dependencia y escaso apoyo familiar, acuden diariamente al comedor del Adulto Mayor, regentado por el Centro de Acción Social Matilde Hidalgo.
“No habrá administración buena si no es capaz de topar el lado humano y en el lado humano están los adultos mayores, las personas con discapacidad y las madres; hemos querido cambiar la dinámica del comedor y le llamamos con mucho cariño rincón de amor, porque eso es lo que damos ahí, mucho amor a los adultos mayores que muchas veces son olvidados de sus hijos”, señala la Viceprefecta, Nívea Vélez, quien tiene a cargo el Área Social de la Prefectura.
Los principios que guían el accionar del CASMH en esta área son: autonomía, mantención en medio habitual, participación, fortalecimiento de sus capacidades funcionales e integración social,
que permiten a la persona mayor permanecer inserta en la sociedad; así el trabajo se enfoca en ver a las personas mayores como ciudadanos activos de la sociedad, sujetos de derechos que pueden y quieren aportar al desarrollo de su entorno. “La cortesía, amabilidad y afectividad son las características de quienes atendemos a estas personas, el buen trato que ellos reciben los hace autosuficientes”, enfatiza Zoila Ordóñez, responsable del Comedor.
El Centro Integral del Adulto Mayor dirige estos espacios a personas autovalentes frágiles y dependientes leves. En este lugar se brindan prestaciones básicas, se realizan talleres y actividades educativas para mantener sus capacidades físicas y cognitivas.
En el Comedor del Adulto Mayor se brinda servicio de alimentación consistente en almuerzo, además refrigerios en la mañana y tarde con un fuerte apoyo de voluntarios y entidades del Estado como el Ministerio de Inclusión Económica y Social –MIES-.
En principio la labor social está encaminada a dar protección y atención a los sectores vulnerables, actividad que no tendría ningún sentido sin considerar el aspecto humano. No solo en su juventud fueron un aporte a la sociedad, en la actualidad los adultos también se dedican a crear, componer y cantar.
Esta es una estrofa de la canción que compuso Don Ángel Romero y la dedicó a los adultos mayores: “…Hoy es tu día adulto mayor/ hoy te venimos a festejar/ porque de joven lo haz dado todo/ y ahora de adulto no puedes más/ en este día quiero que sientas/ mucha alegría en tu corazón/ y Dios del cielo Él nos proteja/ y nos regale su bendición…”.
En la juventud, la belleza es un accidente de la naturaleza. En la vejez, es una obra de arte.